la puerta del infierno

Turkmenistán, el gran desierto de Karakum, muy rico en petróleo y gas natural, posee uno de los escenarios más apocalípticos del planeta.

En una antigua prospección de gas ubicada cerca de la pequeña aldea de Darvaza se encuentra: el Pozo de Darvaza o cráter de Darvaza .

Durante los trabajos de excavacion la tierra se derrumbó por culpa de una caverna subterránea, se abrió un agujero de más de 60 metros de diámetro y 20 metros de profundidad. El gas natural brotó del agujero y tuviendo que ser incendiado para evitar que el gas matara a cualquiera que estuviera a cierta distancia de él.

Nunca ha parado de arder debido a la gran cantidad de gas natural que acumula. Desde hace décadas las llamas de aquel incendio se han mantenido provocando un espectacular fenómeno visual para todos los turistas que se aproximan a él, sobre todo de noche, cuando el cráter puede ser visto a millas de distancia.

En la actualidad, el cráter es uno de los principales lugares turísticos del desierto de Karakum.

El gas de su interior sigue consumiéndose de manera incesante y, según relatan ejerce una especie de magnetismo sobre los insectos, atraídos por la luz no pueden evitar arrojarse a las llamas, nadie sabe cuando se apagará...